Resumen:
Nada que los señores estudiantes no dejan de alborotar el cotarro. Una vez, porque quieren servir a la Patria organizando fiestas; otra vez porque se les hace agua la boca cuando no tienen la palabra y nos dan conferencias (preferible las fiestas): otra, porque quieren bailar y divertirse (eso todo el año); y, por fin, otra, porque quieren irse toditos al Congreso de Estudiantes, como van a la cazuela del "Sucre" las noches de juegos Florales y de las veladas patrióticas de los Estudios Jurídicos...